Intervención
del delegado de Cuba, Pablo Berti Oliva en el ejercicio del derecho a
réplica a la Delegación de EE.UU. en el Debate General del tema 4
(situaciones que requieren la atención del Consejo). 33º período
ordinario de sesiones del Consejo de Derechos Humanos. Ginebra, 19 de
septiembre de 2016
Señor Presidente:
Otra vez nos vemos en la obligación de rechazar rotundamente, por su total falta de apego a la verdad, las críticas del representante de Estados Unidos, que en lugar de centrarse en problemas de derechos humanos de su propio país, se dedica a criticar a otros sin fundamento alguno.
Es Estados Unidos, no Cuba, el país en el que el racismo y la discriminación perduran en todos los ámbitos, pero particularmente dentro del mundo policial.
¿Con qué moral Estados Unidos se puede referir a la violencia en detenciones, cuando la brutalidad policial llega a niveles alarmantes en el país? ¿Es que acaso los afroamericanos que han sido asesinados por la policía norteamericana en los últimos meses no son ciudadanos de ese país?
Señor Presidente:
Somos testigos en este Consejo de los crecientes ataques a la soberanía y autodeterminación de varios países, como es el caso de Venezuela, a la que reafirmamos nuestro incondicional apoyo.
Por último, urgimos a Estados Unidos a permitir, sin condicionamientos, la visita del Relator Especial sobre la tortura al centro de torturas que se encuentra en el territorio que se usurpa ilegalmente a nuestro país en la Base Naval en la Bahía de Guantánamo, algo que hasta el propio Alto Comisionado le ha exigido.
Que pongan fin al bloqueo económico, comercial y financiero que constituye una violación masiva, flagrante y sistemática de los derechos humanos del pueblo cubano, incluido el derecho al desarrollo.
Cuba continuará defendiéndose frente a cualquier calumnia en su contra.
Muchas gracias.
(Cubaminrex)
Otra vez nos vemos en la obligación de rechazar rotundamente, por su total falta de apego a la verdad, las críticas del representante de Estados Unidos, que en lugar de centrarse en problemas de derechos humanos de su propio país, se dedica a criticar a otros sin fundamento alguno.
Es Estados Unidos, no Cuba, el país en el que el racismo y la discriminación perduran en todos los ámbitos, pero particularmente dentro del mundo policial.
¿Con qué moral Estados Unidos se puede referir a la violencia en detenciones, cuando la brutalidad policial llega a niveles alarmantes en el país? ¿Es que acaso los afroamericanos que han sido asesinados por la policía norteamericana en los últimos meses no son ciudadanos de ese país?
Señor Presidente:
Somos testigos en este Consejo de los crecientes ataques a la soberanía y autodeterminación de varios países, como es el caso de Venezuela, a la que reafirmamos nuestro incondicional apoyo.
Por último, urgimos a Estados Unidos a permitir, sin condicionamientos, la visita del Relator Especial sobre la tortura al centro de torturas que se encuentra en el territorio que se usurpa ilegalmente a nuestro país en la Base Naval en la Bahía de Guantánamo, algo que hasta el propio Alto Comisionado le ha exigido.
Que pongan fin al bloqueo económico, comercial y financiero que constituye una violación masiva, flagrante y sistemática de los derechos humanos del pueblo cubano, incluido el derecho al desarrollo.
Cuba continuará defendiéndose frente a cualquier calumnia en su contra.
Muchas gracias.
(Cubaminrex)
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