Tomado de Cubadebate.
17 de junio de 2017
Usando las técnicas del storytelling tan caras al marketing político
estadounidense, Donald Trump convirtió ayer en Miami a Luis Haza en todo
un héroe de la historia y del violín.
El administrador del imperio quizo mover corazones, en su anuncio de
su errada política hacia Cuba, evocando un padre ejecutado por los
revolucionarios y un hijo que se enfrentó al “régimen” tocando el “The
Star Spangled Banner” . Aquel muchacho, dijo Trump, hoy es un renombrado
músico en las tierras del Norte, de la “libertad”. El “heroico” Luis
respondió a su exaltación ejecutando una horrenda y desafinada versión
del himno estadounidense, en clara muestra de la Patria que defienden
los reunidos en ese Teatro Manuel Artime.
Lo que nunca dijo Mr. Trump, es que el padre de Luis, Bonifacio Haza,
fue uno de los asesinos del joven líder revolucionario Frank País
García, el más heroico y destacado combatiente de Santiago de Cuba, de
cuyo crimen se cumplen ahora 60 años.
Los hijos no son culpables de la actuación de sus padres; pero sí la
asumen cuando comulgan y blazonan con ella. A esa “Cuba Libre” jamás
volveremos.
Cubadebate los invita a leer este testimonio sobre la muerte de Frank,
realizado por el Contralmirante (R) José Luis Cuza Téllez de Girón, su
amigo en la lucha revolucionaria, que publicamos hace un tiempo en este
sitio:
Guayacán es el nombre común con el que se conoce a varias especies de árboles nativos de América, pertenecientes a los géneros Tabebuia, Caesalpinia, Guaiacum y Porlieria. Todas las especies de guayacán se caracterizan por poseer una madera muy dura. Es justamente por esa característica que reciben el nombre de guayacán, aun cuando no guarden relación de parentesco entre sí.
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De esa canalla ascendencia asesina está llena la mafia cubano americana, hoy regodeándose en su estercolero porque nuestro pueblo seguirá bajo un ilegal y genocida bloqueo que solo sus almas diabólicas y obtusas lo consideran correcto, cuando realmente saben que jamás nos rendiremos
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