En la escuela primaria Capitán Jesús Suárez Gayol, en Camagüey, Véliz Naranjo, quien estuvo en el tributo, dijo que la OPJM tiene el deber de atender a más de un millón de niños y adolescentes del país, hasta los 15 años, con acciones que contribuyan a formar valores y a consolidar la calidad del proceso docente educativo en sus escuelas.
Es vital contribuir a su formación integral, que garantizará el futuro de la nación, y es esencial en esa formación potenciar la enseñanza de la historia de Cuba y de la local desde propuestas de clases más atractivas, una aspiración de los pioneros expresada en sus asambleas, apuntó.
La dirigente juvenil subrayó que los más pequeños poseen actualmente plena participación en todos los procesos sustantivos de la organización. «Este curso tomaron decisiones en sus territorios y propusieron cambios para su plena atención, a través de su presidente municipal y de su estructura integrada por adultos».
Entre los planteamientos más urgentes que debe atender la OPJM mencionó el de la formación vocacional y orientación profesional de los adolescentes, «los cuales demandan de un mayor análisis y planificación de todos los organismos responsables en los territorios».
Igualmente se destacan las preocupaciones por la recreación, la actividad deportivo-cultural y el movimiento de exploradores. «En estos elementos hay que continuar trabajando en cada escuela y localidad», reflexionó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario