La Habana, 4 de septiembre de 2015.
Año 56 de la Revolución.
Querido Fidel:
Un día como hoy, hace 70 años, ascendía usted la histórica Escalinata de la Universidad de La Habana, comenzaba así sus estudios de Derecho en la otrora facultad de Céspedes y Agramonte; Mella, Villena, Trejo y Barceló. El Alma Máter lo recibía y desde entonces supo que tenía ante sí a uno de sus más sensibles, heroicos y dignos hijos; a un joven consecuente y eterno rebelde.
En el mensaje que nos enviara hace tan solo ocho meses, recordaba cuántas universidades existen hoy en el país, fruto de la obra de la Revolución, formadoras de valores revolucionarios y símbolos del compromiso impostergable de los jóvenes con la Patria. Como decía en aquellas líneas será en nuestro paso por la Universidad, donde comenzaremos a tener conciencia de nuestra época y de nuestro deber, a tener la pureza y el desinterés con que siendo jóvenes enfrentamos la vida.
Ante sus constantes alertas, no defraudaremos la confianza depositada en nosotros, sobre todo ante los nuevos escenarios ideológicos que viviremos los jóvenes cubanos. Los estudiantes universitarios llevamos como usted, las doctrinas del Maestro, con la convicción de defender el socialismo, promover el humanismo, la ética y el antiimperialismo, salvar la gran familia que constituye la especie humana y lograr al fin el aún vacilante y dudoso equilibrio del mundo.
Sirva este día, en el que los universitarios cubanos celebramos juntos el Aniversario 70 de su ingreso a la Universidad, para ratificar el compromiso de avanzar hacia el porvenir llenos de sueños e ideales, con el escudo revolucionario al brazo.
Sus compañeros de la FEU.
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