- Categoría: Historia
- Escrito por YANET ALINA CAMEJO FERNÁNDEZ
Hoy 21 de mayo se cumplen 50 años del asesinato del joven guardafrontera asesinado por soldados estadounidenses.
Tenía tan solo 22 años, cuando cubría su turno de guardia, realizado en la Brigada de la Frontera, unidad perteneciente al Ejército Oriental, donde se defiende ese límite fronterizo con el territorio ocupado por la Base Naval norteamericana de Guantánamo, contra la voluntad expresa del pueblo cubano y en violación de las más elementales normas del derecho internacional.
Aunque nació en Bayamo, provincia Granma, sus restos yacen en el panteón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias del cementerio de Santa Ifigenia en Santiago de Cuba.
Su muerte fue injusta porque cumplía con el llamado a las filas del Servicio Militar Obligatorio, como los hombres y mujeres cubanos que cumplen con esa misión de defender la Patria.
Actualmente cientos de jóvenes, de los más destacados y vanguardias de todo el país, pasan dos años en la Brigada de la Frontera, siendo fieles a la sangre derramada que no fue en vano
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