Las
afectaciones del bloqueo al comercio interno cubano fueron analizadas
este miércoles por directivos y trabajadores del Ministerio de Comercio
Interior
Las afectaciones del bloqueo al comercio interno
cubano fueron analizadas este miércoles por directivos y trabajadores
del Ministerio de Comercio Interior (Mincin), con el fin de aportar al
informe que presentará Cuba, en la Asamblea General de Naciones Unidas,
como denuncia a esa injusta política.
Según Odalys Escandel García, viceministra primera del Mincin, este sector se ve afectado actualmente por las restricciones sobre el comercio con Estados Unidos, que genera pérdidas por reubicación geográfica hacia mercados lejanos, con incremento de los gastos de transportación, de los precios por compras a intermediarios, costos de inmovilización de productos, y desfase de los ciclos de entrega, entre otros.
En el sector alimentario, específicamente en el área de los granos, la afectación total en el 2015 ascendió a 22,7 millones de dólares, informó Bárbara Mesa León, directora comercial del Grupo de empresas mayoristas de productos alimenticios y otros bienes de consumo.
En el caso del Grupo comercializador de productos industriales y de servicios, los daños inciden fundamentalmente en la mercancía destinada para la venta y aseguramiento a la recuperación del comercio; y en la logística de almacenes en cuanto a la categorización de estos, subrayó Elbia Rosabal Rodríguez, jefa del Departamento de Comercio Mayorista de dicho Grupo.
También se dieron a conocer las afectaciones en el cumplimiento en cantidad o tiempos de entrega del calzado ortopédico y de la canastilla, así como en la falta de financiamiento y de mercados cercanos para la adquisición de mobiliario, medios de informatización y otros, lo cual afecta tanto al mercado minorista como al mayorista, reduciendo su eficiencia.
Según Odalys Escandel García, viceministra primera del Mincin, este sector se ve afectado actualmente por las restricciones sobre el comercio con Estados Unidos, que genera pérdidas por reubicación geográfica hacia mercados lejanos, con incremento de los gastos de transportación, de los precios por compras a intermediarios, costos de inmovilización de productos, y desfase de los ciclos de entrega, entre otros.
En el sector alimentario, específicamente en el área de los granos, la afectación total en el 2015 ascendió a 22,7 millones de dólares, informó Bárbara Mesa León, directora comercial del Grupo de empresas mayoristas de productos alimenticios y otros bienes de consumo.
En el caso del Grupo comercializador de productos industriales y de servicios, los daños inciden fundamentalmente en la mercancía destinada para la venta y aseguramiento a la recuperación del comercio; y en la logística de almacenes en cuanto a la categorización de estos, subrayó Elbia Rosabal Rodríguez, jefa del Departamento de Comercio Mayorista de dicho Grupo.
También se dieron a conocer las afectaciones en el cumplimiento en cantidad o tiempos de entrega del calzado ortopédico y de la canastilla, así como en la falta de financiamiento y de mercados cercanos para la adquisición de mobiliario, medios de informatización y otros, lo cual afecta tanto al mercado minorista como al mayorista, reduciendo su eficiencia.
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