Por
voluntad propia, su cadáver fue cremado y la ceremonia fúnebre tendrá
lugar el viernes 28, en la Iglesia Presbiteriana Dora Valentín, de
Varadero, de la que fue fundador y pastor hasta su jubilación
En la noche del 25 de agosto, a la edad de 91 años,
falleció el Pastor Emérito de la Iglesia Presbiteriana Reformada en Cuba
Dr. Sergio Arce Martínez; destacado teólogo cubano que entre otras
responsabilidades eclesiales y sociales fue diputado a la Asamblea
Nacional del Poder Popular entre los años 1998 y 2008.
Por voluntad propia, su cadáver fue cremado y la ceremonia fúnebre tendrá lugar el viernes 28, en la Iglesia Presbiteriana Dora Valentín, de Varadero, de la que fue fundador y pastor hasta su jubilación.
Entre 1969 y 1984 dirigió el Seminario Evangélico de Teología en Matanzas. Como líder ecuménico fue miembro de la Junta Directiva del Consejo de Iglesias de Cuba y director de su Centro de Estudios. También ocupó diferentes responsabilidades en su Iglesia y en la Conferencia Cristiana por la Paz, llegando a ser su vicepresidente a nivel mundial, posición desde la que promovió encuentros de solidaridad a favor de Cuba y de los pueblos latinoamericanos, siendo de los iniciadores en 1975, de los talleres Cristianos por el Socialismo.
Al triunfo de la Revolución se encontraba trabajando en los Estados Unidos y decidió regresar a la Patria con su familia, para desde su compromiso de fe participar en la construcción de la nueva sociedad.
Trabajó activamente en la organización de la Campaña de Alfabetización. Fue fundador de los Comités de Defensa de la Revolución.
Se destacó por su extensa producción teológica recogida en artículos y libros, que nombró Teología en Revolución. Se declaró desde su fe cristiana, como un hombre de ideas socialistas y de acción a favor de la justicia social.
Admirador y discípulo de la obra martiana, su inmenso amor a la Patria le mereció el 28 de enero de 2014 la Distinción, Utilidad de la Virtud que entrega la Sociedad Cultural José Martí. Asimismo por su aporte intelectual se le otorgó en el 2007 la Distinción por la Cultura Cubana. También recibió las medallas por la Alfabetización y la del 28 de septiembre.
Llegue a sus familiares, amigos y discípulos, nuestras más sentidas condolencias.
Por voluntad propia, su cadáver fue cremado y la ceremonia fúnebre tendrá lugar el viernes 28, en la Iglesia Presbiteriana Dora Valentín, de Varadero, de la que fue fundador y pastor hasta su jubilación.
Entre 1969 y 1984 dirigió el Seminario Evangélico de Teología en Matanzas. Como líder ecuménico fue miembro de la Junta Directiva del Consejo de Iglesias de Cuba y director de su Centro de Estudios. También ocupó diferentes responsabilidades en su Iglesia y en la Conferencia Cristiana por la Paz, llegando a ser su vicepresidente a nivel mundial, posición desde la que promovió encuentros de solidaridad a favor de Cuba y de los pueblos latinoamericanos, siendo de los iniciadores en 1975, de los talleres Cristianos por el Socialismo.
Al triunfo de la Revolución se encontraba trabajando en los Estados Unidos y decidió regresar a la Patria con su familia, para desde su compromiso de fe participar en la construcción de la nueva sociedad.
Trabajó activamente en la organización de la Campaña de Alfabetización. Fue fundador de los Comités de Defensa de la Revolución.
Se destacó por su extensa producción teológica recogida en artículos y libros, que nombró Teología en Revolución. Se declaró desde su fe cristiana, como un hombre de ideas socialistas y de acción a favor de la justicia social.
Admirador y discípulo de la obra martiana, su inmenso amor a la Patria le mereció el 28 de enero de 2014 la Distinción, Utilidad de la Virtud que entrega la Sociedad Cultural José Martí. Asimismo por su aporte intelectual se le otorgó en el 2007 la Distinción por la Cultura Cubana. También recibió las medallas por la Alfabetización y la del 28 de septiembre.
Llegue a sus familiares, amigos y discípulos, nuestras más sentidas condolencias.
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