El 24 de julio de 1783, el mundo tuvo el privilegio de ver nacer a Simón Bolívar, uno de los más grandes hombres de la historia latinoamericana y universal. Por tal motivo, los pueblos de América rememoran este día el aniversario 232 del natalicio de El Libertador, quien vislumbró la necesidad de la unión de los pueblos de nuestra región.
Hoy el ideario del patriota venezolano permanece más vigente que nunca, como baluarte ideológico de la Revolución Bolivariana que impulsó el Comandante Hugo Chávez, y de otros procesos revolucionarios que fueron surgiendo en Latinoamérica en las últimas décadas.
Su espada de unidad va recorriendo las naciones latinoamericanas que despertaron y se enfrentan a los dominios imperiales, en busca de la definitiva independencia.
El Comandante bolivariano llevó la bandera de Bolívar y su pensamiento como consigna del proceso revolucionario venezolano; traspasando las fronteras y materializando dichos ideales a través de la concreción de iniciativas de solidaridad, cooperación e integración en la región, como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América.
El Libertador dejó especialmente a cinco naciones una herencia inmortal, la libertad e independencia, ya que como estratega y Comandante de las fuerzas patriotas libró las batallas decisivas para lograr su emancipación y librarlas del colonialismo español. Son ellas las actuales Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela.
Fue un militar y político de ideales revolucionarios e integracionistas, cuyo mayor sueño fue la unión de Hispanoamérica en una gran nación para crear la anhelada Patria Grande.
Simón Bolívar nos dio el ejemplo para enfrentar las dificultades; y Hugo Chávez, al rescatar su legado, nos enseñó a defender la independencia conquistada por los próceres independentistas.
En el aniversario 232 del natalicio del Libertador, el desafío de la región es construir la integración latinoamericana y caribeña, como mejor tributo a su ejemplo perdurable, y a la memoria del Comandante Chávez, su mejor discípulo, quien mejor empuñó su espada libertaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario