IV Pleno de la Unión de Periodistas Cubanos: Retos nuevos y antiguos sobre el tapete
El IV Pleno de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec)
se celebró este jueves 9 de julio, con la participación de unos 425
delegados de toda Cuba mediante un moderno sistema de videoconferencia.
En la reunión se plantearon y debatieron
importantes temas relacionados con el ejercicio de la prensa cubana de
cara a los nuevos desafíos que impone la actual situación internacional y
en especial el cambio que se aprecia en las relaciones entre Cuba y
Estados Unidos, aunque según dejó claro en sus palabras de resumen
Antonio Moltó Maturell, presidente nacional de la organización no
gubernamental, ese no es el principal aspecto que debe condicionar el
trabajo de los periodistas cubanos.
De acuerdo con las palabras del dirigente,
esta reunión nacional de los profesionales de la información es
consecuente con lo recogido en la conferencia nacional del Partido
Comunista de Cuba en cuanto a seguir ampliando la cultura de la
comunicación ante los retos que imponen los medios alternativos de
comunicación y distribución de contenidos como la Internet, la telefonía
celular, las redes inalámbricas o la distribución mediante soportes
individuales como discos y memorias flash.
En el evento se presentó el resultado de
una encuesta y análisis general del funcionamiento y efectividad de los
medios institucionales de difusión y alternativos que mostró la
desventaja de los primeros ante los segundos, fenómeno que no es
privativo de Cuba, aunque en este país el problema se agudiza dadas las
condiciones materiales desventajosas de los medios estatales como
resultado de una economía nacional que no alcanza su florecimiento.
Esas carencias materiales que se arrastran
desde hace años, principalmente desde la década de los 90 del siglo XX
en que se produjo en Cuba una gran depresión económica debida al
desmoronamiento del campo socialista y que se conoce como Período
Especial y que hace que el desarrollo tecnológico de la nación no pueda
marchar en todas las esferas a la par del vertiginoso avance registrado
por las tecnologías de la información.
La mayoría de las intervenciones de los
delegados al Pleno giró en torno a cómo enfrentar los retos del
cambiante escenario internacional en medio de las restricciones
impuestas principalmente por el férreo cerco económico, financiero e
informativo que mantiene el Gobierno de Estados Unidos sobre la mayor de
las Antillas desde hace más de medio siglo, llamado por ellos “embargo”
aunque con más veracidad conocemos como “bloqueo”,
que se mantiene casi inalterable a pesar del mejoramiento de las
relaciones entre ambos países que incluye el intercambio de embajadas a
partir del próximo 20 de julio.
Ese acercamiento, marcado en gran medida
por las buenas intenciones del pueblo norteamericano, trae aparejados
también peligros pues, como ha trascendido, se mantiene en la política
del gigante norteño la intención de provocar en Cuba un cambio de
régimen hacia otro que resulte compatible a sus intereses imperialistas,
solo que utilizando métodos menos agresivos.
Sin embargo, se mantienen vigentes muchas
de las tácticas como el financiamiento a planes subversivos que,
solamente durante el tiempo presidencial del señor Barack Obama, ha
alcanzado más de 139 millones de dólares dedicados a la subversión y 200
millones al financiamiento de transmisiones de radio y televisión hacia
Cuba, originadas en territorio norteamericano y portadoras de contenido
político.
Todos esos retos y amenazas –unos nuevos y
otros antiguos– deben enfrentarse con responsabilidad, profesionalidad,
sentido común, ética y total conciencia del momento histórico, y en esa
tarea tiene la prensa un papel primordial recurriendo a la creatividad,
con contenidos que encierren valores sociales pero que resulten
atractivos para competir con los medios alternativos abundantes en
contenidos banales y de esta forma atraer a la audiencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario