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Cuba en el Deporte
Por Roberto Ramírez, enviado especial de Jit
Toronto.- Los más de 200 miembros de la delegación cubana llegados hoy a esta urbe, sede de los XVII Juegos Panamericanos, cubrieron sin contratiempos los trámites migratorios y de acreditación, y se sumaron al incrementado ajetreo de las villas de alojamiento.
La gran mayoría del grupo, incluidos boxeadores, judocas y gimnastas, ocuparon posiciones en el funcional recinto construido para la justa, al tiempo que remeros, caonístas y tiradores partían hacia instalaciones más cercanas a sus escenarios de competencia.
El edificio asignado a Cuba en el primero de ellos tiene una posición privilegiada por su cercanía a zonas importantes, incluida la que funge como “corazón” del sistema de transporte, y pese al predominio del color gris el panorama de modernidad proyecta una imagen atractiva.
Directivos del INDER arribados días antes aseguraron a JIT que han encontrado todas las condiciones para garantizar el plan de preparación a cubrir desde este lunes a solo horas de que la justa viva sus primeros compases de su calendario, asignados desde el martes al polo acuático.
Técnicos, logísticos y especialistas del Instituto de Medicina del Deporte se empeñan en el montaje de los programas de entrenamiento y de atención a los atletas, mientras se precisa el plan de vuelos posteriores y continúa siendo prioridad el trabajo profiláctico en materia de lucha antidopaje.
La bienvenida quedó marcada por unos 23 grados de temperatura y cielo despejado, pero las noches llegan con más fresco y ese es otro elemento a tener en cuenta por los galenos en aras de evitar afecciones entre quienes dejaron atrás un sofocante verano.
El certamen es el tercero de su tipo organizado en suelo canadiense después que Winnipeg recibiera las ediciones de 1967 y 1999, y se pondrá a prueba el subliderazgo sostenido por Cuba desde 1971, únicamente abandonado para reinar 20 años después.
Toronto.- Los más de 200 miembros de la delegación cubana llegados hoy a esta urbe, sede de los XVII Juegos Panamericanos, cubrieron sin contratiempos los trámites migratorios y de acreditación, y se sumaron al incrementado ajetreo de las villas de alojamiento.
La gran mayoría del grupo, incluidos boxeadores, judocas y gimnastas, ocuparon posiciones en el funcional recinto construido para la justa, al tiempo que remeros, caonístas y tiradores partían hacia instalaciones más cercanas a sus escenarios de competencia.
El edificio asignado a Cuba en el primero de ellos tiene una posición privilegiada por su cercanía a zonas importantes, incluida la que funge como “corazón” del sistema de transporte, y pese al predominio del color gris el panorama de modernidad proyecta una imagen atractiva.
Directivos del INDER arribados días antes aseguraron a JIT que han encontrado todas las condiciones para garantizar el plan de preparación a cubrir desde este lunes a solo horas de que la justa viva sus primeros compases de su calendario, asignados desde el martes al polo acuático.
Técnicos, logísticos y especialistas del Instituto de Medicina del Deporte se empeñan en el montaje de los programas de entrenamiento y de atención a los atletas, mientras se precisa el plan de vuelos posteriores y continúa siendo prioridad el trabajo profiláctico en materia de lucha antidopaje.
La bienvenida quedó marcada por unos 23 grados de temperatura y cielo despejado, pero las noches llegan con más fresco y ese es otro elemento a tener en cuenta por los galenos en aras de evitar afecciones entre quienes dejaron atrás un sofocante verano.
El certamen es el tercero de su tipo organizado en suelo canadiense después que Winnipeg recibiera las ediciones de 1967 y 1999, y se pondrá a prueba el subliderazgo sostenido por Cuba desde 1971, únicamente abandonado para reinar 20 años después.
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