SANCTI SPÍRITUS.—La permanente demanda por sus servicios y el
elevado nivel de satisfacción de los pacientes que concurren a sus
instalaciones constituyen señales inequívocas de la calidad de la
atención médica que desde hace 25 años presta el hospital de
rehabilitación Doctor Faustino Pérez Hernández, única institución de su
tipo que funciona fuera de la capital del país.
Según confirmó a Granma la doctora Sara María Díaz Díaz, Máster en Medicina Bioenergética y Natural y subdirectora de la institución, en el centro se desempeñan unos 110 trabajadores entre médicos, enfermeros, expertos en rehabilitación y personal administrativo, quienes laboran para aliviar secuelas derivadas de accidentes cerebrovasculares, enfermedades degenerativas y traumáticas del sistema ostiomioarticular y otras patologías como el llamado mal del Parkinson y la esclerosis múltiple.
Asentado en una casona de 1943 a un costado de la carretera a Zaza del Medio, el hospital dispone de una discreta capacidad de hospitalización, desarrolla la modalidad de rehabilitación institucional con extensión a la comunidad y mantiene vínculos estrechos con el sistema de atención primaria de salud y con especialidades afines como ortopedia, neurología, cardiología, reumatología, dermatología y medicina interna, entre otras.
En estrecha relación con el Centro Internacional de Restauración Neurológica (Ciren), radicado en La Habana, el Faustino Pérez acoge el proyecto nacional de neurorrehabilitación integral a pacientes con esclerosis múltiple, una enfermedad que está considerada como la primera causa de discapacidad neurológica en adultos jóvenes.
Alrededor de 340 enfermos de todas las provincias del país han sido tratados en virtud de dicho programa que establece seis semanas de ingreso y cuatro de seguimiento con rehabilitación integral, incluido tratamiento sicológico al paciente y al familiar o tutor.
Aunque para la esclerosis múltiple no existe como tal una cura definitiva e incluso hoy la ciencia se debate en establecer si su origen es viral, genético o por ambas causas, se ha demostrado que el tratamiento seguido aquí mejora ostensiblemente la calidad de vida de las personas.
En el contexto del primer cuarto de siglo de creado, el centro médico se benefició con trabajos de remozamiento en el servicio de hidroterapia (piscina), una de sus salas, módulo docente, gimnasio fisioterapéutico y almacenes, labores que está previsto extender próximamente a la casona central.
Según confirmó a Granma la doctora Sara María Díaz Díaz, Máster en Medicina Bioenergética y Natural y subdirectora de la institución, en el centro se desempeñan unos 110 trabajadores entre médicos, enfermeros, expertos en rehabilitación y personal administrativo, quienes laboran para aliviar secuelas derivadas de accidentes cerebrovasculares, enfermedades degenerativas y traumáticas del sistema ostiomioarticular y otras patologías como el llamado mal del Parkinson y la esclerosis múltiple.
Asentado en una casona de 1943 a un costado de la carretera a Zaza del Medio, el hospital dispone de una discreta capacidad de hospitalización, desarrolla la modalidad de rehabilitación institucional con extensión a la comunidad y mantiene vínculos estrechos con el sistema de atención primaria de salud y con especialidades afines como ortopedia, neurología, cardiología, reumatología, dermatología y medicina interna, entre otras.
En estrecha relación con el Centro Internacional de Restauración Neurológica (Ciren), radicado en La Habana, el Faustino Pérez acoge el proyecto nacional de neurorrehabilitación integral a pacientes con esclerosis múltiple, una enfermedad que está considerada como la primera causa de discapacidad neurológica en adultos jóvenes.
Alrededor de 340 enfermos de todas las provincias del país han sido tratados en virtud de dicho programa que establece seis semanas de ingreso y cuatro de seguimiento con rehabilitación integral, incluido tratamiento sicológico al paciente y al familiar o tutor.
Aunque para la esclerosis múltiple no existe como tal una cura definitiva e incluso hoy la ciencia se debate en establecer si su origen es viral, genético o por ambas causas, se ha demostrado que el tratamiento seguido aquí mejora ostensiblemente la calidad de vida de las personas.
En el contexto del primer cuarto de siglo de creado, el centro médico se benefició con trabajos de remozamiento en el servicio de hidroterapia (piscina), una de sus salas, módulo docente, gimnasio fisioterapéutico y almacenes, labores que está previsto extender próximamente a la casona central.
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